Creí en tí, confié, te quise infinitamente, eras lo más grande que había tenido, y yo, yo era lo más grande que habías tenido. Decías que era fantástica, maravillosa, hermosa... ¿Para qué tanta mentira? Excusas, falsos testimonios, robos de corazones, hurtos de almas y mucho, mucho sufrimiento. Eras mi príncipe, lo sabías. Los dos sabíamos que no lo dimos todo, que nos engañábamos pero sólo había que poner de nuestra parte, sólo. No quisiste intentarlo, me tenías para lo que quisieras y, me fallaste. Me dejaste tirada... por última vez; porque no voy a permitir que vuelva a pasar, no voy a permitir volver a fallarme a mí misma. No... porque si una cosa he aprendido es que si quiero querer a alguien, primero me tengo que querer yo. Basta, es hora de ser feliz. ;D
Abrí los ojos y sonreí.Tenía la sensación de que había dormido con la sonrisa toda la noche.Con todas las que sueño, recuerdo y pienso.Seguía ahí.Tenía ganas de vivir,tal vez en otro sitio,pero con fuerzas.Seguro que sonreiría aunque no todo marchase de manera perfecta.Desayuné.Me puse vestido.Era un día cualquiera, en el que te pones cualquier ropa.Pero me gustan los vestidos.Me hacen sentir bien.Nada planeado fuera de lo habitual.Pero estaba feliz.La vida me daba razones.Y él era la principal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario